Sokołowsko: del cine Zdrowie al Archivo Kieślowski

Vivimos también -en al menos tres ocasiones, creo- en un pueblo que se llama Sokołowsko, cerca de Jelenia Góra, en la región de Silesia Baja, en las “tierras recuperadas”. Este lugar es el que mejor recuerdo de toda mi infancia. Allí también estaba uno de los balnearios donde trataban a mi padre. Era un lugar de curación y también de vacaciones, con más o menos mil de habitantes: los pacientes, los bañistas  y alrededor de doscientos empleados con sus familias.

En Sokołowsko había un lugar en el que se hacían funciones de teatro ambulante y proyecciones de películas. Era una sala bastante decente, en un centro cultural, con buenos proyectores y una pantalla grande. Ponían también películas para niños. Pero había un problema: como muchos de mis compañeros, yo no tenía dinero para la entrada porque nuestros padres no podían dárnoslo. En ocasiones sí, pero no muy a menudo. Así que me subía con mis compañeros al tejado. Allí había una especie de ventilador grande. Algo parecido a una chimenea con agujeros a ambos lados. A través de esos agujeros se podía escupir con mucha facilidad al público. Lo hacíamos, probablemente, por pura envidia. Nos daba rabia que aquella gente pudiera entrar al cine y nosotros no.

Podíamos ver tan sólo una parte de la pantalla. Mi posición habitual me permitía ver el lado inferior izquierdo, algo así como medio metro cuadrado, tal vez un metro. A veces se podía ver la pierna de un actor si estaba de pie; o una mano o la cabeza, cuando estaba tumbado. Se oía algo, lo suficiente para poder seguir la acción. De esta manera veíamos las películas… y escupíamos al mismo tiempo. Nos echaban de aquel tejado una y otra vez, pero volvíamos a subir sin problema, porque la pared del centro de cultura se encontraba justo debajo de un monte, por lo que resultaba fácil subir, trepar a un árbol y del árbol, saltar al tejado. Así que allí tenían lugar todos nuestros juegos infantiles.

fragmento de la Autobiografía de Krzysztof Kieślowski
(Krzysztof Kieślowski. O sobie, Znak, Cracovia, 1997)

En este mismo pueblo del sur de Polonia, Sokołowsko, desde hace diez años se celebra el festival Hommage à Kieślowski​. Las películas se proyectan en el mismo cineteatro Zdrowie del que Kieślowski habla en su autobiografía. Las actividades del festival tienen lugar también en las instalaciones del Laboratorio de la Cultura creado por la Fundación IN SITU en el antiguo sanatorio de Brehmer por el que Sokolowsko se hizo famoso en el siglo XIX.  En el centro para enfermos de tuberculosis que funcionó en esta localidad hasta los años setenta del siglo XX fue tratado el padre de Kieślowski​, aquí también murió; en 1974 el director rodó en Sokołowsko su documental Radiografía (Prześwietlenie, 1974).Gracias al festival Kieślowski vuelve a estar presente: cada año en septiembre, durante tres días, el pueblo se llena de gente, de espectadores aficionados al cine de Kieslowski, cinéfilos de todas edades, estudiantes de cine, críticos, cineastas, amigos. Hommage à Kieślowski​ es una verdadera fiesta de cine. En cada certamen se elige un título de la filmografía del director como hilo conductor del programa que abarca también el cine polaco contemporáneo y producciones de otros países.  Las proyecciones van acompañadas de coloquios y debates en los que participan los invitados: los colaboradores de Kieślowski y los realizadores de otras películas presentadas. De este modo el festival se convierte en un punto de encuentro entre el patrimonio de uno de los grandes autores de cine europeo y el arte cinematográfico actual. El año pasado, debido a la pandemia, tuvo que cancelarse, este año, si las circumstancias lo permiten, se celebrará a principios de julio. El programa de esta décima edición girará en torno al Decálogo y la Décima Musa, es decir, al cine en general. Entre varias secciones está previsto también un acento español: la retrospectiva de Judith Colell. Ojalá las circumstancias permitan hacerlo realidad.

La Fundación de Arte Contemporáneo IN SITU, presidida por Zuzanna Fogtt -que es también la directora del festival-, ha puesto en marcha otro proyecto importante relacionado con el patrimonio de Krzysztof Kieślowski: el Archivo de Kieślowski [Archiwum Kieślowskiego]. La idea de este archivo es crear un centro de estudios sobre la obra de Kieślowski y reunir en un sitio toda la documentación al respecto. El proyecto cuenta con la viuda del director, Maria Kieślowska, que ya ha cedido su archivo privado al centro, como patrocinadora honorífica. Parte de los recursos que se han podido reunir en Sokołowsko hasta ahora (manuscritos de guiones, fotos, correspondencia) ya está digitalizada y disponible en la página http://www.kieslowski.com.pl, aunque, como dice Zuzanna, les espera una labor titánica para terminar de digitalizarlo todo y traducir a otros idiomas, en primer lugar, al inglés.

Las fotos que presentamos en esta página provienen del Archivo Kieslowski y son cortesía de la Fundación IN SITU